domingo, 9 de enero de 2011

Cecilia, la mujer “single”.

La ciudad en la que vivía Cecilia era una ciudad pequeña, en la que la discreción brillaba por su ausencia, así que tal como lo había pensado, se decidió acercarse a Bilbao a realizar sus compras y elegir el “kit” completo después de ver las diferentes ofertas que especialistas recetaban a sus clientas.

Se lo había dejado bien claro a Bernardo. No quería verlo mas, ni a él ni a los diferentes pretendientes que tenía o podría tener sin dificultad alguna. Quería ser una mujer libre, viajar y decidir por si misma sin contar con, ni para nadie. Estos fueron los motivos por los que se había marcado unas metas en su vida. Había cumplido parte de sus objetivos. Acababa de realizar sus estudios universitarios y aprobar las oposiciones tan deseadas para conseguir su independencia económica sin problema alguno.

Cecilia dedicó gran parte del día en estudiar a fondo las diferentes ofertas, que daban solución a las preguntas que le surgían al haber tomado la decisión que sin duda alguna, le haría cambiar el rumbo de su vida.

Una y otra vez sacaba su agenda electrónica e iba anotando diferentes datos según sus intereses y necesidades… “Un irrigador vaginal, jeringas, tubos de laboratorio, vibrador con pilas de repuesto, bolas chinas, artilugios fálicos de tallas variadas, vaselina, cremas relajantes aromáticas, velas...y otros muchos accesorios del placer y la reproducción”.

-¿Qué desea Usted? –pregunto el especialista, perfectamente uniformado con su bata blanca, mientras le ofrecía a Cecilia asiento.

-Deseo hacer un pedido, quiero ser una mujer “single” –Respondió Cecilia plenamente convencida.

10 comentarios:

  1. Ninguno de esos artilugios puede sustituir una caricia. Se puede ser single, pero sólo eso, de ninguna manera una mujer. El que se acuesta con máquinas, en máquina se convierte.
    Buen relato, amigo.

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  2. Pues no sé qué te diga...
    A mí me parece que Cecila no ha tomado la decisión acertada, pero bueno, ya tendrá tiempo de cambiar de opinión, mientras tanto, dejémosla que experimente...

    Un saludo!
    ;)

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  3. ¡Qué tristeza ser mujer single, y qué aburrimiento!

    Las máquinas hacen de todo y lo hacen bien. A veces pensamos que son insustituibles y que no pasaríamos sin ellas, pero hay algo que siempre les faltará por mucho que la tecnología avance: la iniciativa y el calor humano.

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  4. Yo no creo que esa sea la decisión definitiva. Pero... para una falta. En fin, que cada uno se organiza como puede.

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  5. Muy buena historia.
    Cecilia debería pensar más sobre esa decisión.

    Un beso:)

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  6. Pues yo apoyo a Cecilia, eso no quiere decir que yo lo haria porque me encanta el amor pero ojalá tuviera el valor de hacerlo fíjate lo que te digo!
    olé Cecilia! eso si, espero que no te arrepientas!

    Cita

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  7. ...traigo
    sangre
    de
    la
    tarde
    herida
    en
    la
    mano
    y
    una
    vela
    de
    mi
    corazón
    para
    invitarte
    y
    darte
    este
    alma
    que
    viene
    para
    compartir
    contigo
    tu
    bello
    blog
    con
    un
    ramillete
    de
    oro
    y
    claveles
    dentro...


    desde mis
    HORAS ROTAS
    Y AULA DE PAZ


    COMPARTIENDO ILUSION
    maximo

    CON saludos de la luna al
    reflejarse en el mar de la
    poesía...




    ESPERO SEAN DE VUESTRO AGRADO EL POST POETIZADO DE ALBATROS GLADIATOR, ACEBO CUMBRES BORRASCOSAS, ENEMIGO A LAS PUERTAS, CACHORRO, FANTASMA DE LA OPERA, BLADE RUUNER Y CHOCOLATE.

    José
    Ramón...

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  8. Pobre Cecilia, nadie la entiende... menos mal que yo sí, la entiendo, la apoyo y... comparto, sí, señores, comparto, con convicción, eso sí, hasta que se me vuelva a cruzar algo/alguien en mi camino que me haga replantearme mis creencias (siempre una puerta abierta, por si acaso)

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  9. A veces son mejores esos artilugios que un hombre (o una mujer, según sea el caso): los hay malos amantes, peores compañeros, ...

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