¿Inflamos el déficit?

Me llamo Encarna, soy ama de casa, tras trabajar ocho horas diarias de administrativa en un taller de coches. Soy la abeja reina de “Talleres y rectificados Los Manolos”. En total somos tres: Dos zánganos y yo.

Hoy es Sábado y como todos los fines de semana, me he dedico a mi casa y paso la aspiradora con los auriculares puestos, mientras oígo la situación económica por la que pasamos. Se rumorea que nuestro siempre pesimista presidente,ha inflado el déficit para hacer “noseque”, que no entiendo… y entre una cosa y otra acabo de limpiar. Así que me dispongo a darme una ducha. Eso me relaja… soy capaz de cantar los cuarenta principales bajo los chorritos calientes de mi adorada ducha.

Me quito el odiado chándal rojo, uniforme de limpieza casera. Una vez más, veo mis redondeces desbordantes y… decido que… hoy no, porque esta noche tengo una cena con mis amigos, pero mañana me voy a poner a dieta y voy a empezar a andar dos horas al día… "hasta el santo"

Llega el momento de la verdad y me peso, quiero apuntar los datos en la cuadricula de control de adelgazamiento que me he preparado con el ordenador de mi Jonathan y así como sin quererlo he cogido los dos botes tamaño familiar de champú de caballo (1,5 litros/ud.), que son buenísimos… y me he subido a la báscula con todo ello.

… y es que, total mañana me voy a poner a dieta y ésta noche voy a hacer excesos… ese sobrepeso no se va a notar… pero mañana, en mi primer día de rigurosa dieta, mi peso se verá favorecido. Seguro que Mariano (el de cabellera lustrosa y barba ajada) lo sabrá entender.